viernes, 29 de abril de 2011

La celebración en Hacienda el Cortijuelo

Bueno, en el día de hoy, en el que el Guillermito de Inglaterra (que, como dice Manu Sánchez, se está quedando calvo perdido) y la Catalina (que no catalana) se están casando, recobramos la elaboración de este blog que contará una boda mucho más austera que la del Guillermito (que se está quedando calvo) pero, segurísimo, mucho más divertida.


Recobramos este blog después del paréntesis de Semana Santa, semana en la que no hemos parado de llorar y que, más que un respiro, ha sido un suplicio continuo viendo como nos iban arrancando poco a poco y palmo a palmo nuestra Semana Grande de la peor manera posible. Desde hace más de 80 años (por cuestiones políticas que es mejor no recordar) no se producía una catástrofe cofrade tan grande. Lo peor ha sido despedirme de mi cristo hasta el 8 de Octubre sin tener ni un simple arañón en mi cuello: un desastre, pero así es la vida; estoy seguro que en nuestro día Montserrat brillará como no ha podido brillar por las calles de Sevilla en este fatídico Viernes Santo.


Bueno, sentimentalismos aparte,hoy os vamos a comentar uno de los más esperados componentes de nuestra boda: el lugar de la celebración.


Como sabéis, desde hace algún tiempo, nos consideramos de la "Kale Borroka" de Espartinas y, para alimentar esta leyenda, no nos moveremos de allí ni para celebrar nustra boda.


El lugar de la cena es la "Hacienda El Cortijuelo", y está situado en pleno centro de Espartinas.


El Cortijuelo era una hacienda situada a las afueras del pueblo, cuyo crecimiento la ha ido situando en la avenida principal del mismo y que lleva el nombre de la que era alcaldesa de la localidad (María Regla Jiménez). El caso de la alcaldesa es curioso: ha sido la primera alcaldesa del pueblo en la época democrática y sólo su fallecimiento le apartó del cargo, cargo que actualmente ocupa su hijo. En homenaje póstumo, se le ha dedicado la calle principal de Espartinas y que, a su vez, constituye la travesía del mismo.


La Hacienda dispone de dos emplazamientos exeriores y dos salones interiores.


En teoría, y si el tiempo lo permite, usaremos tan sólo los emplazamientos exteriores para la recepción y para la cena. En caso de mal tiempo (lluvia y/o frío), la recepción y la cena se harán en los salones interiores.


El "planning" original sería efectuar la recepción en el primer emplazamiento exterior. Este emplazamiento está adornado con una piscina y es un antiguo almacén de aceitunas, puesto que en uno de los salones se fabricaba aceite. La llegada a este jardín estará marcada por antorchas y seréis recibidos por las primeras bandejas con bebidas.


El segundo emplazamiento exterior es donde,si el tiempo no le da por hacer lo de Semana Santa, disfrutaremos de la cena. Es un precioso patio adornado con naranjos y flores de temporada y con un clásico suelo de estilo rústico coronado por un pozo en el centro del mismo. Es el típico patio de cortijo o hacienda andaluza.
Tras la cena, ya sí pasaremos a uno de los salones interiores, donde será el baile y la barra libre, quedando el patio exterior a disposición de aquellos fumadores que tengan que saciar su vicio.


El salón del baile está adornado con objetos de labranza antiguo y barriles de bodega y tendrá situado el escenario en las antípodas de la barra, lo que permitirá que una cosa no estorbe a la otra. En este salón habilitaremos algunas mesas y sillas para que nuestros mayores y las sufridoras portadoras de tacones se puedan ir dando un respiro.


El salón interior que falta por comentar, esperemos usarlo únicamente para visitarlo el día de la boda y que quede totalmente inhabilitado al uso, lo cual sería una magnífica señal. Este salón sería utilizado para la cena en caso de lluvia o frío y, sólo en caso de lluvia, el mismo salón del baile sería utilizado para el aperitivo.


Como podréis ver en las fotos y como podréis ver en directo, el lugar de celebración es bastante coqueto y no tiene ninguna estridencia ni nada que resulte llamativo. Precisamente eso, la sencillez y belleza serena del lugar, ha sido lo que nos ha llevado a celebrarlo aquí.
Como valor añadido al lugar, hemos de comentaros que su cercanía a Sevilla y que el autobús parará en la misma puerta van a facilitar y acomodar bastante el acceso a los invitados. Al no ser un lugar excesivamente grande, gozaremos de pequeños paseos, hecho que agradecerá más de un tobillo.


El Catering Pou dispone de la exclusividad del servicio del lugar, por lo que será el que nos sirva en la boda. Es un catering que mezcla los ingredientes y platos típios andaluces con una cocina de vanguardia innovadora y cuidada. Cuidan muchos los detalles y el montaje, aspectos que, como todos sabéis, ambos miramos con lupa. El menú, por supuesto, está por decidir y a la espera de la prueba de menú, que se hará allá por Agosto pero del que ya tenemos una ligera idea, puesto que hemos asistido a alguna degustación.


Esperemos que "El Cortijuelo" sea de vuestro agrado y que las distintas sorpresas que os tenemos preparadas os gusten, lo que es seguro que el marco que va a componer la hacienda ayudará bastante a hacer de nuestra noche un poquito más especial si cabe.


Ahora se acerca la feria y, como no, disfrutaremos de ella, por lo que  volveremos a vernos en el blog dentro de unos diez días y, ahora sí, prometemos actualizarlo, al menos, una vez cada semana.


Un abrazo a todos y "¡vamonos pa la feria!"...

Julito y Fátima

No hay comentarios:

Publicar un comentario